El Real Valladolid agotará todas las vías de la justicia deportiva para intentar que sea anulada la segunda tarjeta amarilla que el colegiado Lizondo Cortés mostró a Joseba Llorente en el descuento del partido Racing - Real Valladolid, en la última jornada liguera, y que le acarreó la expulsión y el posterior castigo de la RFEF.
Para ello, una vez que ha encontrado respuestas negativas tanto del Comité de Competición como del Comité de Apelación de la RFEF a los recursos presentados, el Club enviará esta semana un último recurso ante el Comité Español de Disciplina Deportiva en el que solicita que la segunda tarjeta amarilla (según Lizondo Cortés por controlar un balón con la mano con la intención de engañarle) sea anulada, lo que le permitiría jugar el próximo domingo ante el Athletic Club.
Dado que el CEDD no fallará en su primera vista -prevista para este viernes 19-, el Real Valladolid solicitará la suspensión cautelar de la sanción de un partido de suspensión impuesta por la RFEF. Si ésta le fuera concedida, Llorente podría seguir jugando con la misma hasta que el CEDD emitiera su fallo.
Foto (Ramón Gómez): Llorente explica a Lizondo Cortés que no se llevó el balón con la mano.
