Un ascenso con galones

¡Qué forma de conseguirlo! El Real Valladolid no solo es equipo de Primera sino que lo ha logrado de una forma magistral. Sí, en un agónico final de temporada, con veinte minutos de puros nervios y tensión a la espera de que otros resultados hiciesen buena la victoria ante la SD Huesca y confirmasen el ascenso directo. Pero con unos números de equipo ganador que avalan la trayectoria en esta 2021-22 y que reflejan a un conjunto ambicioso que supo superar los baches que atravesó para corregir sus déficits y fortalecerse jornada tras jornada hasta alcanzar el objetivo por la vía rápida.

El primer dato sobre el que hay que poner la lupa es el de los puntos. 81 en el casillero que, en una exigente competición, a punto estuvieron de no ser suficientes y al mismo tiempo solo el golaverage privó al Pucela del título de campeón. Sin embargo, una de las puntuaciones más elevadas para un ascenso en lo que llevamos de siglo XXI y de las más altas en el actual formato de playoff vigente desde la 2010-11. 81 puntos (fruto de 24 victorias y nueve empates en 42 partidos) que hacen del de este año uno de los ascensos más caros de las últimas 12 temporadas por detrás de los de la 2020-21, 2014-15 y 2011-12, y que habrían valido para subir en cualquiera de los cursos entre 2000 y 2010, cuando eran tres las plazas para ir a la élite directo.

Además, la segunda plaza en general resulta de haber sido el segundo mejor local del campeonato y el tercer mejor visitante. En el Estadio José Zorrilla se consiguieron 14 triunfos y cuatro empates para hacer 46 puntos, los mismos que la UD Almería y solo superado en uno por la SD Eibar. 13 encuentros consecutivos sin conocer la derrota en casa hicieron las delicias de la afición vallisoletana que cada quince días disfrutaban 'in situ' del juego alegre de los suyos. Mientras que lejos de Valladolid se arrancó con dudas en una primera vuelta que dejó derrotas dolorosas como las de Burgos y Amorebieta pero después el equipo ajustó para acabar sumando 35 puntos con 10 victorias y cinco empates, de nuevo igualado con la UD Almería y por detrás del CD Tenerife.

Potencial ofensivo
Otra de las facetas por la que destaca el Real Valladolid es la ofensiva. Ahí ha sido el mejor sin atisbo de duda, por los 71 tantos a favor que le han convertido en el máximo goleador de LaLiga SmartBank y también por los 467 disparos realizados, el que más ha hecho este curso. Se trata de una media de 1,69 goles y de 11,12 chuts por partido. En cuanto a los que fueron entre los tres palos también cifra muy destacada, 208 (4,95 por encuentro), solo por detrás de los 226 de Las Palmas; lo que supone una puntería del 44,5%.

Para poner en contexto la cifra de 71 goles, hay que remontarse a la temporada 2014-15 para encontrar a un equipo que la haya superado. Es cierto que el RCD Espanyol la igualó el año pasado, pero fueron la UD Las Palmas y el Real Betis los que marcaron 73 cada uno hace ocho años, logrando ambos el ascenso por caminos diferentes.

En defensa, luces y sombras en el presente curso porque aunque se sufrieron goleadas abultadas también se registró la mejor racha histórica sin encajar gol que finalmente se fijó en 646 minutos. En total 43 tantos encajados, prácticamente uno por partido, que hacen de la defensa blanquivioleta la sexta mejor del torneo. A lo que hay que unir 17 porterías a cero en esos 42 partidos, es decir, el 40%.

En el análisis con balón, este Real Valladolid de Pacheta ha firmado una posesión media del 54% y una precisión de pase del 81%, datos que también ejemplifican el espíritu y la vocación que ha tenido el equipo. Y, por último, en el apartado disciplinario, el cuadro castellano ha visto 90 cartulinas amarillas y seis rojas. En cuanto a las expulsiones se trata del quinto que más ha recibido mientras que en el ranking de las amarillas es el sexto menos tarjeteado según los datos que ofrece LaLiga. En número de faltas, cometió 513 y sufrió 610.

Números que resumen, analizan y explican lo que es una única voz: Pucela es, de nuevo, de Primera.