El Real Valladolid comenzó la segunda vuelta como finalizó la primera: con victoria por dos goles de diferencia en el Estadio José Zorrilla. Si el pasado sábado se deshizo del R.C.D. Mallorca por 3-1, este domingo doblegó al Real Zaragoza por 2-0, con goles de Javi Guerra (min. 12) y Óscar (min. 74).
El encuentro estuvo marcado por la climatología y las lesiones. La lluvia protagonizó el encuentro, dejando un terreno de juego resbaladizo, al que los jugadores tardaron en acoplarse. Y quizá ese estado del césped provocó hasta tres lesiones musculares: Ebert se rompió en el minuto 21, dejando su puesto en la banda a Larsson, y los zaragozistas Apoño y Loovens cayeron a continuación, sustituidos por Tarsi y Lanzaro, respectivamente.
En cuanto a la lectura del juego, el partido tuvo tres fases. La primera, hasta el gol de Javi Guerra, en el minuto 12, en la que el Real Valladolid llevó la iniciativa, presionando la salida del balón del Real Zaragoza con Baraja, sustituto del lesionado Sastre, incrustado junto a Óscar. En esos minutos, el balón fue blanquivioleta y Javi Guerra, antes del gol, ya había avisado con un cabezazo al palo, tras una falta botada rápidamente por Ebert y que descolocó a la zaga maña, que llegó a Zorrilla con tres bajas y que tras la lesión de Loovens, Manolo Jiménez tuvo que recomponer al completo.
Tras el gol de Javi Guerra, por el que Djukic apostó en detrimento de Larsson en el eje del ataque, y la lesión de Ebert, el Real Zaragoza se hizo con el mando del balón, pero la realidad es que no tuvo su día a la hora de desbordar, también porque el Pucela junto sus líneas atrás y no dejó resquicio alguno para la construcción aragonesa, que, sin Apoño, quedó solo en los pies de Movilla.
Al estar tan atrás el Pucela, le costó salir a la contra, aunque Óscar estuvo muy cerca de marcar el segundo. El salmantino apuró la jugada tras un buen pase al espacio de Larsson y en vez de optar por el remate eligió un regate que le dejaba solo ante Roberto, pero que Looevens le sacó limpiamente.
También Javi Guerra pudo marcar su segundo tanto en el minuto 39, pero tras recoger el rechace de Roberto a disparo de Álvaro Rubio mandó alto un balón franco para fusilar al buen portero del Real Zaragoza.
El Real Valladolid fue el dueño y señor del balón parado. En defensa no dio opción alguna de remate al Real Zaragoza y en el área rival, aprovechando las bajas mañas en su retaguardia.
Segunda parte
En la segunda mitad, si cabe, el ataque del Real Zaragoza se intensificó, con las líneas aún más adelantadas. El partido se jugaba en el campo del Pucela, pero una y otra vez, el equipo visitante se veía impotente para conseguir disparar a la portería de Dani.
Cómodo y seguro de sí mismo, el Real Valladolid aprovechó agazapado para asestar el golpe mortal. Lo logró en el minuto 74. Bueno, que acababa de saltar al campo por Omar, vio la autopista por la izquierda de Peña por la banda izquierda y el lateral izquierdo -sustituto en esta ocasión de Balenziaga- vio la incorporación de Óscar al corazón del área y su gran servicio le hizo aún mejor el charro con un disparo ajustado al palo.
Con el 2-0 comenzó la tercera y última fase del choque. El Real Zaragoza tiró la toalla y el Real Valladolid se gustó. Y si no hubiera sido por el meta Roberto el Pucela podría haber marcado hasta tres goles más: en el minuto 79 sacó un "mano a mano" clarísimo ante Larsson; en el córner siguiente atajó un cabezazo con marchamo de gol de Valiente; y el minuto 85 volvió a parar otro "mano a mano" con Óscar, que, cuando el partido se rompió, dio un auténtico recital de fútbol.
Con esta victoria, el Real Valladolid se asienta en la mitad de la tabla con 28 puntos, con 10 de ventaja sobre el descenso y números que le otorgan un gran equilibrio: 8 victorias, 4 empates y 8 derrotas, con 29 goles a favor y 25 en contra. Pero el camino que queda por recorrer todavía es muy largo. La próxima parada, el próximo sábado en Valencia, a las 18 horas, frente al Levante U.D.
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Fotografía (Ángel Becerra): Carlos Peña y Javi Guerra se abrazan a Óscar tras el segundo gol del partido.
