Míchel, uno de los jugadores destacados en el partido de entrenamiento disputado este jueves en Zorrilla, compareció en la sala de prensa para analizar la actualidad blanquivioleta. El valenciano, noticia esta semana por las negociaciones para su renovación, se mostró satisfecho y feliz en Valladolid, aunque no quiso entrar en detalles sobre cómo avanzan las conversaciones.
Sí valoró el parón liguero, algo que vendrá bien al equipo para coger fuerzas antes del exigente calendario hasta finales de 2018. “Es momento de cargar las pilas para afrontar los siguientes partidos con el mismo nivel que hemos demostrado hasta ahora. Sabemos que si no competimos a tope no podemos puntuar”, explicó.
Lo cierto es que el Pucela vive un momento dulce gracias a los 17 puntos que tiene en la tabla, pero todos tienen los pies en el suelo sabedores de que el objetivo aún está lejos. “Nosotros siempre nos fijamos en los equipos que están abajo. Sabemos cuál es nuestro objetivo”.
