Javier Baraja y la confianza

El vallisoletano Javier Baraja llegó, como jugador, a ser capitán del Club de su ciudad, del de su vida, de su Real Valladolid. Ahora, como técnico, ha logrado clasificar al Promesas para disputar el playoff de ascenso a Segunda División, un hito en la historia del filial blanquivioleta y una situación que ha analizado junto con Estrella Galicia respondiendo las preguntas de los aficionados.

"Creo que el equipo tiene sus posibilidades en el formato que se va a dar" comenzó el técnico, que insistió en la "ilusión de poder rendir al nivel de todo el año y competir como hemos competido hasta ahora". Esa confianza que demuestra el del barrio de las Delicias en sus jugadores es la que también ha recibido por parte del Real Valladolid, que apostó por dar continuidad al buen trabajo del míster en la cantera y otorgarle las riendas del Promesas.

Consideró Baraja, interrogado sobre la posibilidad de que alguno de sus jugadores pueda dar el salto a la élite, que "es un salto muy grande pero alguno cuenta con un proceso madurativo más avanzado y podría aparecer en el fútbol profesional en breve, esperemos que el año que viene veamos a muchos en Primera División o en Segunda, a poder ser en el Real Valladolid". 

Sobre su labor esta temporada al frente del filial blanquivioleta el entrenador aseguró que "el objetivo era estabilizar al equipo en Segunda División B" pero que "a medida que vimos que se podía conseguir algo más grande los chicos han creído, y eso nos ha llevado a crecer de manera individual y colectiva, ese ha sido el éxito".

Hombre de Club
Javier Baraja, quien opina que "conseguir el ascenso sería histórico para la entidad", repasó también lo que el Real Valladolid ha significado en su vida. "Estoy encantando de seguir el proceso formativo en este Club, en el que me he formado, y el reto de formar jugadores para dar el salto al primer equipo como en su día lo di yo". 

Y es que el vallisoletano puede presumir del orgullo de haber sido capitán de la primera plantilla del equipo de su ciudad, algo que le ha permitido realizarse como jugador. De su etapa como futbolista rememora "el debut ante el Deportivo, por lo que significó, de la mano de Pepe Moré", además de "los ascensos" o "momentos personales que me han hecho sentir difernete por vestir la camiseta del Real Valladolid".

Por último, el entrenador esbozó algunas líneas sobre su gestión en el banquillo al detallar que "lo táctico es importante al igual que lo técnico, y el equilibro de estos con lo físico, trato de tener equilibrio en todas las facetas", algo que complementa con "lo psicológico y motivacional, hay que intentar llegar más allá de lo futbolístico para que los jugadores puedan trabajar más liberados a nivel mental".