Borja Iglesias, bestia negra del Real Valladolid la pasada temporada con cinco dianas en dos partidos, fue precisamente el encargado de romper la inmaculada racha de Jordi Masip. El cancerbero catalán acumulaba 333 minutos imbatido desde el gol marcado por el granota Postigo en la sexta jornada liguera, allá por el 27 de septiembre.
Un mes después, tras dejar a cero la portería ante Villarreal (0-1), Huesca (1-0) y Betis (0-1), Masip volvía a encajar. El cancerbero blanquivioleta, con siete dianas recibidas en diez partidos, es el segundo menos goleado de la máxima categoría del fútbol nacional por detrás del atlético Oblak (cinco goles en nueve partidos).
El catalán ha conseguido dejar a cero su portería en cinco encuentros, la mitad de los disputados hasta el momento por el Real Valladolid.
