Son muchos los aficionados y los miembros de las categorías inferiores que se acercan a los Anexos en estos primeros días de pretemporada para presenciar con orgullo los entrenamientos dirigidos por Antonio Gómez. Diez jugadores formados en la cantera del Real Valladolid participan en las sesiones del primer equipo, lo que demuestra que el trabajo tiene sus frutos y lo que hace que se conviertan en espejo de los jóvenes valores que aprietan en los equipos de base.
Jacobo, Baraja, Álvaro Antón, Jesús Rueda y Carlos Lázaro tienen ficha profesional, mientras que Javi Jiménez, Durán, Javi Navas, Quique y Raúl Navas intentan hacerse con un hueco en la primera plantilla durante las exigentes sesiones de trabajo. Además, Rubén Sánchez, recién fichado para el filial, también sueña con poder competir con los "mayores" cuando comience la competición dentro de poco más de un mes.
Evidentemente, no es fácil que las promesas hagan realidad su sueño. Para lograrlo hacen falta muchos años de sacrificio y tener la suerte de estar en el momento adecuado en el lugar adecuado, de que el entrenador te dé la alternativa. Y luego aprovechar la oportunidad, claro. Lo saben de sobra tanto los canteranos noveles como los veteranos, que no dejaron escapar el tren en su momento después en casi todos los casos de cesiones o traspasos a equipos de categoría inferior.
De momento, todos ellos tienen el orgullo de lucir el escudo del Real Valladolid, a juego con su sangre blanquivioleta. Sin ninguna duda, darán el máximo por convencer al míster y por aportar su granito de arena en la ardua tarea de hacer regresar al lugar que le corresponde al Club de su vida.
Fotografía (César Minguela): De pie posan los canteranos con ficha profesional (Baraja, Lázaro, Jacobo, Rueda y Antón) y agachados los que tienen ficha del Promesas (Rubén Sánchez, Raúl Navas, Quique, Durán, Javi Navas y Javi Jiménez).
