Hambre, humildad y gol
Marcos André, a un paso de cumplir su sueño tras pasar por Tercera, Segunda B y Segunda División
La historia de Marcos André es de esas que gusta leer y gusta contar. Como todos los niños brasileños soñaba con triunfar en el fútbol y, con apenas 19 años, vino a España para “pelear por llegar lo más arriba posible”. Tras pasar por Tercera División, Segunda División B y Segunda, el ariete está a solo un paso de debutar en la máxima categoría con el Real Valladolid.
“La verdad es que no ha sido nada fácil, allí hay mucha competencia y al final hay que trabajar mucho”, explica. “Cuando sales de tu país y vienes para acá solo no te queda otra que pelear y tener hambre por llegar lo más arriba posible”.
Su magnífico año en el Mirandés, club en el que estuvo cedido la pasada campaña, le ha abierto las puertas de un equipo de Primera, aunque tiene claro que no puede salirse un solo metro del camino que le ha traído hasta aquí. “Cuando salgo cedido en mi cabeza estaba triunfar en Valladolid. Nos salió una temporada muy buena en lo colectivo y en lo individual, no era fácil porque era mi primer año en Segunda y estoy muy contento. Tengo que seguir trabajando, humilde y con los pies en el suelo para poco a poco hacerme un hueco en la plantilla”, repite.
“Veloz y con gol”, está acostumbrado a marcarse objetivos a corto plazo. Ahora mismo, la meta es ganarse la confianza del míster y “triunfar” en el Real Valladolid. Que así sea.
