Icono chat Chat
Skip to main content
Real ValladoliDI

Pequeña gran familia con balance muy positivo

Entrenador y delegado del Real ValladoliDI aseguran que han conseguido formar el equipo que buscaban cuando se inició el proyecto

El fútbol no es solo fútbol, y así lo demuestra en este caso el Real ValladoliDI. El proyecto nació hace dos años y, de la mano de Dani Rabadán y Paco Muñoz -entrenador y delegado, respectivamente-, ha ido cogiendo forma hasta convertirse en algo más que un equipo. “El balance es muy positivo. Desde el primer día buscamos formar un equipo y lo hemos conseguido. Me atrevería a decir que somos una pequeña gran familia. Buscamos que aprendan y mejoren, pero sobre todo que disfruten y lo pasen bien. Tenemos que valorar la alegría con la que van a los entrenamientos o a las fases”, cuenta el míster.

Dani, que también es el preparador físico del Juvenil A, confiesa que tuvo “ciertas dudas” cuando le plantearon la opción de llevar las riendas del equipo que participa en LaLiga Genuine Santander, pero aclara que tardaron muy poco en disiparse, ya que “desde el primer momento todo fue muy positivo”. “Estoy muy contento con ellos y creo que ellos también conmigo”, señala, a lo que Paco afirma que “Dani ha congeniado muy bien con ellos”: “Se ha hecho muy buen equipo, los chicos están contentos y el Real Valladolid también. En general, ha sido como partir de 0 y llegar a 100 rápidamente”.

El cuerpo técnico siempre está en contacto permanente con las familias, y más ahora debido a la situación generada por el COVID-19. Es Paco, en su función de delegado, quien habla con ellas “un par de veces por semana”. “También nos interesan las familias, ya que mi labor es que estemos unidos. Además, los padres también se vuelcan con el equipo”, cuenta, ya que su función es mantener la unión “entre jugadores, Club y sus fundaciones”.

Su trabajo en la Fundación Personas le hace tener esa conexión a diario con los jugadores, sobre todo con los que viven en las residencias y viviendas tuteladas. “Prestamos apoyo a las viviendas desde la Fundación Personas. En mi caso, hay dos jugadores”, comenta. Por ello, él sabe de primera mano cuánto echan de menos el balón: “Lo de ir a taller les da un poco igual, pero siempre preguntan cuándo vamos a volver a entrenar. El equipo es un sueño para ellos. Cuando vamos a las sedes a jugar les encanta, se sienten importantes”.

El delegado ensalza la labor de las monitoras que trabajan con ellos, a las cuales califica de “profesionales como la copa de un pino”. “Graban vídeos con ellos e incluso se ponen con ellos. Les mantienen activos las 24 horas”, asegura.

Ilusión y ganas
Ya ha pasado un mes desde que el Real ValladoliDI, al igual que el resto de equipos del Club, dejó de entrenar, algo que la plantilla recibió “con cierta tristeza”. “Nos lo comunicaron el miércoles de esa semana y se lo trasladamos a los chicos. El jueves -día de entrenamiento-, tanto para ellos como para nosotros, es un día especial porque ven a sus compañeros y les hace mucha ilusión”, cuenta Dani.

Precisamente, Paco destaca que “la ilusión y las ganas” de la plantilla. “A los chavales, cuando lo cuentan a sus amigos, les miran como héroes. Dicen que les dan la ropa, que se van a Tarragona, que han estado con los jugadores… Y, además, juegan”, explica. Situación que ha provocado que en este momento haya “una lista larga para entrar en el equipo”.

Pese al momento extraño que vivimos, el equipo blanquivioleta trata de mantener el trabajo. “Al principio nos comunicaron que serían 15 días y decidimos darles libertad, pero cuando fuimos viendo que se alargaba optamos por mandarles un pequeño plan adaptado con ejercicios sencillos de trabajo cardiovascular, de fuerza, de core… Les hemos incidido en que no es obligatorio, pero sí recomendable”, explica Dani. Aunque los chicos y las chicas están concienciados y muchos de ellos mandan vídeos al cuerpo técnico enseñando cómo hacen los ejercicios.

El entrenador reconoce que “echan de menos el balón y están preocupados por si pierden las mejoras adquiridas”. Pero no es el único que añora la normalidad, ya que asegura que la hora y media de entrenamiento cada jueves le sirve “para mucho”. “El día a día va muy rápido y no nos paramos a pensar. Ese rato te permite disfrutar del fútbol en su más pura esencia. Tanto yo como mi cuerpo técnico lo echamos de menos”, comenta.

Suspensión temporal
Debido a la situación actual derivada del COVID-19, la Fundación LaLiga ha decidido posponer la continuidad de la competición y el cierre de la temporada 2019/2020. Así, tras las dos primeras fases disputadas por el Real ValladoliDI en Tarragona y Sevilla, respectivamente, la tercera -en Gijón- y la cuarta -en Bilbao- quedan aplazadas y LaLiga Genuine Santander regresará en 2021, cuando la situación sanitaria lo permita.

  Dani Rabadán