A prolongar la dinámica contra la RS Gimnástica
El Real Valladolid Promesas logró cuatro victorias y otros tantos empates en las visitas del conjunto torrelaveguense
Los Anexos acogerá este domingo (12.00 horas) una final por la permanencia entre Real Valladolid Promesas y RS Gimnástica de Torrelavega. Un duelo que históricamente ha sido positivo para el filial blanquivioleta, ya que se mantiene invicto en las visitas del conjunto cántabro tras cuatro victorias y otros tantos empates.
El precedente más reciente es el del pasado curso, en el que ambos conjuntos protagonizaron un partidazo. Tobar adelantó a la Gimnástica en el inicio, pero Pozo y Slavy dieron la vuelta al resultado antes del descanso. Después de que los visitantes se quedaran con uno menos por la expulsión de Alberto Delgado, la escuadra cántabra anotó el empate con un gol de Fran Rivera en propia puerta; aunque, poco después, Arroyo aprovechó un centro de Iker Pérez para marcar con el corazón el definitivo 3-2.
Para encontrar la anterior visita de los torrelaveguenses hay que remontarse a la temporada 1999/00, la cual se saldó con triunfo vallisoletano en un intenso encuentro en el que el Promesas se quedó con 10 por la doble amarilla a Bardal y acabó llevándose el partido (1-0) con un gol de Tariq en el minuto 79.
El duelo más plácido para el Real Valladolid Promesas fue el de la 1992/93, cuando se puso 3-0 gracias al tanto inicial de Toño Martín y al doblete de Bercianos. De nada sirvió el 3-1 conseguido por los visitantes en el tiempo de añadido. Por otro lado, en el curso siguiente también logró esa ventaja, pero en esa ocasión el partido finalizó 4-3, con la expulsión de Garrido en el tramo final. Rubén Baraja firmó un triplete y allanó el camino que abrió David Martín.
El resultado más repetido de esta serie de encuentros fue 0-0, que se dio en las campañas 1991/92, 1996/97 y 1998/99. Mientras, el otro empate (2-2) se produjo en la 1997/98 en un partido que concentró los cuatro goles entre los minutos 45 y 62, con remontada incluida del Promesas. Lanza y Emilio lograron las dianas blanquivioleta.