El tropiezo del Pucela frente al Albacete BP dejó dolidos a los jugadores del Real Valladolid, que encajaron la primera derrota del curso. “Sabíamos que este día infelizmente iba a llegar. Pero somos un grupo muy fuerte y en el vestuario ya se habla de levantar la cabeza y aprender de los errores”, expresó Guilherme tras el encuentro.
El portero explicó que fue “un partido menos conseguido” por parte del equipo, que acusó algunos fallos. “Trabajar esta semana y enfocar esos errores para que no vuelvan a pasar”, dijo. En ese sentido, abogó por “recuperar los puntos” que dejaron en Albacete y “dar todo delante de nuestra gente” en los dos próximos partidos en Zorrilla. Además, afirmó que “el mensaje en el vestuario es de ánimo y de estar más unidos que nunca”.
A pesar del resultado, el meta tuvo trabajo bajo palos, con varias intervenciones de mérito. “En el primer tiempo pude ayudar al equipo y para eso estoy aquí. Prefiero conseguir los tres puntos y no hacer muchas paradas”, concluyó.