La clasificación dice que el Real Valladolid tiene siete puntos y siete equipos por debajo. Un buen balance si se analiza fríamente, aunque está claro que las sensaciones dejadas por los blanquivioleta en el último partido no fueron las mejores. Enfrente había un rival que se cerró detrás del medio campo, aprovechó una oportunidad para ponerse por delante en el marcador y mereció llevarse la victoria de Zorrilla si se contabilizan las ocasiones de la segunda parte, cuando los de Mendilibar se lanzaron al ataque desesperadamente.
El empate logrado in extremis por Víctor fue un premio por no haber bajado los brazos hasta el último suspiro, pero no sirvió para que los propios jugadores y el entrenador practicaran un discurso resultadista. Todos coincidieron en que era necesario mejorar con vistas a los próximos compromisos, ante equipos como el Getafe que a priori juegan y dejan jugar.
¿Y cómo se mejora? Mendilibar lo tiene claro. Cristalino. Hay que recuperar las señas de identidad que permitieron a este equipo ilusionar a la afición con un ascenso y con una más que digna actuación en su regreso a Primera. Muchas veces se pecaba de falta de experiencia a la hora de amarrar los resultados, pero se cuentan con los dedos de una mano las veces que los seguidores blanquivioleta no pudieron ir con la cabeza bien alta después de un partido. El de Zaldibar quiere que vuelva a practicar sobre el campo la presión asfixiante y adelantada para impedir que el rival saque con facilidad el balón. Que se defienda en grupo. Que se corra. Que se pelee. Que se maneje la pelota con criterio y velocidad de circulación. Sabe que es el camino para crecer. Y los jugadores, también.
El Pucela llega a Getafe, por tanto, con ganas de volver a ser el Pucela. Y, por supuesto, con la intención de romper una mala racha de resultados que no le ha permitido saborear un triunfo en los últimos tres compromisos. A priori la plaza puede ser propicia, por mucho que enfrente haya "jugadores de una gran calidad que juegan como un equipo". El magnífico recuerdo del 0-3 logrado la temporada pasada es un claro ejemplo de que el Real Valladolid es capaz de vencer al equipo de moda del fútbol español en los últimos años.
Obgeche y Goitom, fuera de la lista
Mendilibar no ha podido contar para elaborar la convocatoria con los lesionados Iñaki Bea, Jesús Rueda y Luis Prieto. El cuerpo médico ha preferido reservar al central vasco, que sufre una leve distensión en los adductores. El resto de descartados, ya por decisión técnica, son Alberto, Ogbeche, Goitom y Medunjanin.
Así, la lista de convocados es la siguiente: Asenjo, Villar, Pedro López, Baraja, García Calvo, Nano, Marcos, Óscar Sánchez, Álvaro Rubio, Vivar Dorado, Borja, Aguirre, Pedro León, Sesma, Escudero, Víctor, Canobbio y Kike. Estos jugadores serán los que tratarán de conseguir la primera victoria a domicilio y, de paso, prolongar la sequía de triunfos del Getafe en el Coliseum Alfonso Pérez.
Fotomontaje (digival.es)