Otra vez en Palamós a pelear por un ascenso
El conjunto de Rubi regresará 21 años y medio después al escenario donde fraguó un ascenso
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20 de junio de 1993. Última jornada de Liga. El Real Valladolid de Felipe Mesones visita al Palamós con la necesidad de ganar para asegurarse el ascenso a Primera División. La victoria final (1-2), con dos penaltis transformados por Iván Rocha, permite a los blanquivioleta regresar a la máxima categoría del fútbol nacional y cerrar una buena campaña, a cinco puntos del campeón, el Lleida, y empatado con el Racing de Santander.
Mesones alineó a Lozano, Walter Lozano, Manolo García, Iván Rocha, Cuaresma, Castillo, Rachimov, Caminero, Amavisca, Roberto Martínez y Onésimo (Javi Rey, minuto 15). Con el arbitraje de Carmona Méndez, el Pucela se adelantó en el minuto 10, pero Jordi Condom restableció las tablas. De nuevo fue Iván Rocha el encargado de adelantar a los visitantes justo antes del descanso, una ventaja que ya no se echaría a perder.
El partido será por siempre recordado por el llamado “tren del ascenso” en el que viajaron en la previa 900 aficionados del Pucela. Casi mil blanquiovioleta que disfrutaron de lo lindo en un partido marcado por la serenidad de Iván Rocha a la hora de fusilar con su potente zurda desde los once metros y, por qué no decirlo, por las discutidas decisiones de Carmona Méndez. El colegiado señaló sendos penaltis que fueron muy protestados en las filas del equipo local y Rocha aprovechó para comprar un billete de primera clase hacia la Liga de las estrellas.
El Real Valladolid regresa este domingo a un escenario que trae muy buenos recuerdos y de nuevo lo hará con el objetivo de ganar en busca de acercarse a un ascenso por el que habrá que sudar sangre. Como siempre. Porque los grandes éxitos requieren de grandes esfuerzos.