Tenía una alteración sanguínea que le dejaba sin defensas. "No lo entiendo muy bien, pero más o menos la explicación es que mi bazo se comía mis plaquetas buenas y malas y me dejaba sin defensas". La solución, extirparlo. El pasado viernes Jesús Rueda fue sometido a la operación -fue un éxito-, apenas dos días después ya estaba en casa y este jueves visitó a sus compañeros en los Anexos.
Como no podía ser de otra manera, observó el entrenamiento con una gran "envidia" sana y fue recibido con alegría por los integrantes del primer equipo y del filial. Después atendió a los medios de comunicación en la sala de prensa, donde explicó sus sensaciones.
"La verdad es que me encuentro mucho mejor de lo que me esperaba, todo ha salido muy bien y anímicamente estoy fenomenal. Los doctores me han recomendado que dé paseos con moderación por la mañana y por la tarde y que tenga una dieta blanda durante diez o doce días. Espero empezar a correr antes de un mes", explicó ilusionado.
Fotografía: Jesús Rueda posa este jueves en los Anexos durante el entrenamiento de sus compañeros.
