España vive una situación diferente a la habitual debido a las importantes medidas de prevención ante el COVID-19, entre las que destaca el confinamiento en los hogares. ¿Cómo afecta la situación a la mente de un deportista de alto rendimiento? El departamento de Psicología y Formación del Real Valladolid ha elaborado unas pautas para que los jugadores del categorías inferiores hagan más llevadero el tiempo que pasen encerrados en sus casas y ayuden a ganar este importante partido.
Lander Hernández, psicólogo del Club, señala que esta situación tiene “unas particularidades a tener en cuenta” para los deportistas profesionales: “Incertidumbre, ansiedad, depresión y miedo a la situación”. La primera de ellas se refiere al tiempo inicial, en el que no se sabía lo que iba a pasar con las competiciones. “Esta situación puede afectar también a su desarrollo como profesional, dificultando su etapa de crecimiento e incluso pudiendo generar dificultades en el ámbito contractual”, explica.
Respecto a la ansiedad y depresión, que pueden ser provocadas por el momento actual, asegura que esto convierte a los deportistas en “una población de riesgo para este tipo de patologías”. “Debemos comprender que la prohibición de poder realizar actividad física en la calle puede provocar que aumente la activación del organismo que demanda el ejercicio al que está acostumbrado, mientras que la menor realización de este puede dar como resultado unos condicionantes ansiógenos que se deben controlar. Por otro lado, el deportista recibe una alta gratificación por el deporte que realiza y eso hace que su autoestima se mantenga en niveles óptimos, pero si otras áreas de su vida no están igualmente ajustadas puede suceder que al eliminar la fuente principal de satisfacción se pueda dañar seriamente él autoestima y autoconcepto del profesional, pudiendo derivar en situaciones depresivas”, relata.
Por último, Lander apunta que los deportistas también son personas y que ellos tienen “la misma incertidumbre y miedos que el resto de la población”: “Los deportistas también se preocupan por el incremento de casos, el miedo a infectarse, están en alarma por sus allegados más ancianos o con patologías...”.
A tener en cuenta
En clave más blanquivioleta, el psicólogo ha desarrollado una serie de pautas para los jugadores de toda la estructura del Club. La primera de ellas consiste en “explicar a los chicos el porqué de esta situación de aislamiento”. “En colaboración con el departamento médico, se les hace entender que se ha creado una estrategia para vencer al virus y que a ellos se les ha asignado la función de permanecer en casa. Es importante generar en ellos el sentimiento de pertenencia a un grupo por una finalidad común y entender los diferentes roles que van a tener otros miembros de nuestro ‘equipo’ (en este caso personal hospitalario, policía, militares...) debiendo apoyarles y facilitándoles el trabajo para conseguir derrotar al virus”., explica.
Para los futbolistas también es importante conocer su rol, ya que deben tener claro que “no son unas vacaciones” y que han de ser “proactivos” para cumplir el objetivo de frenar los contagios. Por ello, el departamento ha elaborado unas pautas para ayudar a los jugadores: creación de horarios y rutinas; relación con otros miembros en el hogar; tipos de ocio alternativos; tecnología y redes sociales; y habilidades psicológicas.
Lander asegura que es muy importante “realizar un horario diario para las diferentes tareas a realizar, cumpliendo el tiempo asignado para cada una”. “Esto va a generar una rutina que permitirá adaptarse mejor a la nueva situación teniendo objetivos concretos para cada fase del día y estableciendo unas consecuencias positivas después de su consecución que actuarán como reforzadores de la conducta. En este horario debe aparecer el tiempo dedicado al estudio, a los ejercicios planificados por los preparadores y el que se dedica a actividades de ocio en el hogar”, señala.
En este periodo de confinamiento se compartirá mucho tiempo con las otras personas del hogar, una situación a la que hay que añadir las emociones que provoca la situación de aislamiento, la cual “puede derivar en conflictos y discusiones que suelen incrementar el malestar y la carga mental”: “Es por ello que explicamos a los jugadores la importancia de que asuman la división de tareas en el hogar y les dotamos de algunas herramientas para la resolución de conflictos”.
Por otra parte, es importante planificar de manera adecuada el ocio. “Este no puede ocupar todo nuestro día, pero sí que debe de tener el espacio adecuado en nuestra jornada, ayudándonos a desconectar y dándonos unos estímulos positivos”, comenta. En la actualidad el ocio se ha tornado “más individual y tecnológico”, acaparando esta área en su mayoría los juegos online. “Hay que aceptar que es un nuevo ocio en la sociedad actual, pero este no puede acaparar todo el tiempo dedicado al esparcimiento (además en ocasiones puede ser contraproducente generando frustración, malestar e ira) debiendo compensarse con otras actividades de ocio. Una idea que damos es potenciar diversas formas de ocio familiar, pudiendo realizar actividades conjuntas donde se logre una conexión entre los miembros de la casa que ayudará a sobrellevar de mejor manera estos días y a generar momentos agradables con nuestros seres queridos”, expresa.
En el apartado de la tecnología y las redes sociales, el psicólogo del Club incide en la importancia de que los jugadores hagan “un uso adecuado”, teniendo un tiempo al día “para poder informarse y visualizar contenidos que sean de interés para los jugadores”. Sobre ello, aclara que hay que ser “muy cuidadoso con esta herramienta no compartiendo informaciones que no estén contrastadas y pudiendo seguir la evolución de la enfermedad”, a lo que apunta que se procure hacer “solo para informarse diariamente de los nuevos escenarios y no de manera continua”.
Lander reconoce que las nuevas tecnologías tienen cosas “muy positivas y son estupendas en estas situaciones para comunicarse de manera inmediata desde cualquier parte del mundo”, pero recomienda “no estar continuamente pendientes de todas las publicaciones nuevas o con la obligación de generar contenidos que agraden a la gente”. “Podemos hacer que nuestra autoestima sea dependiente del éxito de nuestras publicaciones”, dice.
Por último, afirma que desde la psicología del deporte existen una serie de herramientas que son “de gran utilidad para los deportistas ante los problemas señalados” en estas situaciones, entre otras se suelen utilizar las siguientes: “Aceptación de la incertidumbre, ajuste emocional y ensayo en imaginación”.
