El fútbol no es la única inquietud de García Calvo. Aparte de su familia, sí es lo más importante, pero también tiene tiempo para otras aficiones que le llenan de ilusión. Una de ellas es la cultura enológica y la otra es la música. Un viejo rockero sobre el terreno de juego y un nuevo rockero sobre el escenario. Apasionado de Enrique Bunbury, muchas veces canta por los pasillos de Zorrilla algún tema del zaragozano o de Héroes del Silencio. De hecho, la temporada pasada se encargó de recopilar entre sus compañeros varias canciones para que sonaran antes del inicio de los partidos en Zorrilla. Él eligió varias de Héroes, como no podía ser de otra manera.
Tras muchas horas de ensayo junto a los integrantes del grupo Happening -fieles seguidores del Real Valladolid- ha decidido embarcarse en una aventura que hace que le brillen los ojos. Se llama "La influencia de Baco" y consiste en un tributo a Bunbury. El bautismo de fuego será en un concierto público en el Dolce Vita, en La Flecha, este viernes 5 de junio a partir de las 21,30 horas. Con anterioridad ya ha cantado en recitales privados para sus amigos y, por fin, se ha animado a dar rienda suelta a su gran afición. Como no podía ser de otra manera, el repertorio será un tributo a Bunbury e incluirá canciones del solista maño y del mítico grupo de rock que lideró.
¿Significa que deja a un lado el fútbol? García Calvo ha sufrido mucho esta temporada debido a su conocida lesión en el primer dedo del pie derecho. Mucho dolor que superó a duras penas gracias a su profesionalidad y a su cariño al Real Valladolid. En los dos últimos partidos de Liga, el central jugó infiltrado y ayudó a conseguir la ansiada permanencia. "Esta experiencia con la música no significa que dejo a un lado el fútbol, ni mucho menos, en absoluto. Lo hacemos simplemente en plan hobby, con mucho cariño. Es difícil llegar a donde llega Enrique pero queda bastante bien, me gusta el reto".
Para el madrileño, Enrique Bunbury es un artista que significa mucho. "Su música me trae muchísimos recuerdos de mi infancia, de mi vida. Me transmite muchas cosas y me permite hacer más llevaderos los malos momentos". Por eso se atreve a hacerle un tributo junto a los integrantes de Happening, unos fueras de serie recientes ganadores de los Premios Racimo, por cierto. Mucha mierda.